MIENTRAS JULIÁN MUÑOZ SE MUERE EN LA CÁRCEL, EL AMIGO BLESA....
Mientras este camarero granuja, que pretendió un día codearse con los ilustres e intocables ladrones de la oligarquía, agoniza en la cárcel sin perdón...
NUESTRO AMIGO BLESA SE LO PASA A LO GRANDE, FOLLANDO Y VIVIENDO COMO DIOS CON LA BENDICIÓN DE NUESTRA CORROMPIDA JUSTICIA.
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