Ilustración de Stevecutts.com |
Hemos llegado a un punto que somos incapaces de distinguir entre realidad y ficción. Cada día que pasa estamos más alienados, drogados, embotados por infames distracciones y placeres que nos inyecta este destructivo sistema.
Ahora retornan las Elecciones Generales. El revival de una ficción que no cesa. Un juego de tronos para imbéciles donde siempre ganan los mismos. Una cutre puesta en escena por los orcos de una democracia que ya murió. En esta ocasión nuevos personajes entran en escena y forman parte del patético séquito de este cuento interminable. Personajes que pronto se apresuran a unirse a la corrupta comparsa, embozados tras falsos mensajes de esperanza. Son los nuevos engendros del engaño nacidos de la infecta metástasis que asola el páramo nacional.
Hoy nuestra democracia es un fantasma de estercolero, un dramático espejismo mantenido por una oligarquía sostenida por políticos abyectos, deshonrados y apátridas que han hecho del país y de la política un montón de mierda.
Hoy nos enteramos que hasta los rumanos --pueblo que los españoles solemos despreciar-- tienen gobiernos mucho más decentes y demócratas que el nuestro, que en vez de apalear y encarcelar a su pueblo, como durante cuatro años ha hecho Rajoy y sus secuaces con el suyo, dimiten cuando ese pueblo les pide que se vayan por corruptos. !Qué lección para tanto sinvergüenza que presume de demócrata en este puto país¡
Aquí no solo no se van sino que se presentan de nuevo a bombo y platillo a unas elecciones generales con pretensiones de ganarlas. Unas elecciones que supondrán el triunfo de los de zombis y la continuidad de instituciones que ya no son más que apestosos cenotafios.
bucaneroerrante.blogspot.com
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