No ha pasado ni tan siquiera una semana de las elecciones en Grecia y de la contundente y valiente victoria del pueblo griego, cuando Syriza ya está midiendo fuerzas con los amos de la UE. Primero fue Shulz, el socialdemócrata alemán y presidente del Parlamento Europeo el encargado de otear el panorama heleno entre hipócritas sonrisas y parabienes que pronto se desvanecieron en sordas críticas a la "insolidaria" actuación de los griegos al recibir como primer extranjero, el embajador ruso que fue a felicitarles por el triunfo electoral.
Después llegó el estirado presidente del Eurogrupo, el filofascista Jeroen Dijsselbloem, mano ejecutora del siniestro Schäuble, que después de entrevistarse con el Presidente Tsipras lo hizo con el ministro de finanzas griego, Varufakis. Este encuentro se produjo bajo el ostensible enfado del propotente y maleducado presidente del Eurogrupo quien rechazó lacónicamente toda propuesta griega de convocar una conferencia internacional de la deuda diciendo que «esa conferencia ya existe y se llama Eurogrupo». Varufakis en este primer cara a cara expresó afirmaciones contundentes tales como que los griegos no reconocen a la Troyka ni a sus hombres de negro como grupo interlocutor válido en las duras negociaciones que se avecinan, aunqie sí como organismos aislados. Está durísima declaración de Varufakis fue como la "primera en la frente"que dejó a Dijsselbloem totalmente atónito. Tanto que al levantarse ambos de la mesa, el holandés sin mirar siquiera a su interlocutor griego le susurró: "Acaba usted de matar a la Troyka".
También Hollande se ha mostrado con buenas palabras ante Tsipras, así como el italiano Renzi, que le ha regalado una corbata (ambos socialdemócratas), pero que como fieles farautes de la Merkel, se han apresurado aconsejarle que respete los acuerdos, que es lo mismo que viene a exigirle posteriormente Alemania a cajas destempladas.
En estos primeros lances de Grecia con la UE ya ha quedado de manifiesto por parte de aquellos que controlan el cotarro de la actual Unión Europea, que no se lo van a poner nada fácil al SOS. lanzado por el empobrecido país heleno. La Frau ya ha reiterado de manera inflexible que no habrá ninguna negociación por encima de los acuerdos firmados en su día con el anterior gobierno griego de Samarach, así como las declaraciones de su ministro de finanzas, el alemán Schäuble, no deja lugar a dudas cuando con su habitual mala leche escupe que "Alemania no puede ser chantajeada". Pero, ¿quién chantajea a Alemania?
A estos portazos ante la angustiosa llamada de auxilio de Grecia se une nuestro corrupto presidente, Rajoy, que a igual que hace con millones de sus propios compatriotas,también le niega el pan y la sal a los griegos mas que se mueran de hambre.
Patronos de la miseria |
Dicen que el próximo encuentro de Tsipras con Merkel y su ministro de finanzas va a resultar la puntilla para las pretensiones del Teseo griego. Según un documento filtrado a Reuters, Alemania no solo se negará en redondo a cualquier tipo de negociación sobre la deuda griega sino que también exigirá en su reunión de este jueves que el Gobierno de Syriza dé marcha atrás a sus promesas
de aumentar el salario mínimo, suspender las ventas de activos
nacionales y volver a contratar a empleados estatales despedidos. Todo un detalle para un pueblo que se muere. Pero no contenta aún con tamaño desprecio a los griegos, exigirá también, que pague los intereses de la horrorosa deuda en los férreos plazos establecidos, que además logre un superávit primario, sin pagos de intereses, ¡del 3% del PIB en 2015 y del 4,5% en 2016! y que siga subastando sus bienes patrimoniales, privatizando sus puertos, el sector eléctrico y bienes e inmuebles en manos del Estado además de que el nuevo Gobierno griego reduzca en 150.000 el
número de empleados públicos, haga una reforma de las pensiones (las reduzca aún más) y que
mantenga el salario mínimo reducido, al
tiempo que le exigirá que se adihera en cuerpo y alma al inamovible mantra de la
austeridad.
Sólo después de todo ello, incide el texto, Berlín "estará listo para
intensificar la cooperación con Atenas". Sin duda Alemania, que en su día ocupó de manera salvaje el país heleno, hoy está decidida a poner a este pueblo ante un pelotón de fusilamiento.
El socialdemócrta Hollande y Ángela Merkel |
Muchos afamados economistas del mundo se han puesto del lado de Grecia y piden en un manifiesto que se atienda una negociación sincera donde le va la vida a ese pequeño país, cuna de la democracia. Sin embargo, los que debían acabar con este estado de cosas, continúan dejando la economía de la UE en manos de un rencoroso tullido y una psicópata
peligrosa.
La socialdemocracia, gran bufona del Cuarto Reich, sigue bajo las bragas de la dama del Reichstag mientras fascistas de la calaña de Rajoy y compañía babean y hacen la ola al criminal austericismo de la nueva Alemania imperial.
Como corolario, cabría añadir que el nuevo gobierno de Grecia se enfrenta a una UE decidida a cerrar el paso a los partidos "advenedizos" que pretendan romper el statu quo de la actual política económica europea. "A Syriza ni agua", debe ser la consigna generalizada que hoy circula por los alfombrados despachos de Bruselas.
j.m.boix