PÚBLICO / AGENCIAS
MADRID.- El Pleno del
Congreso de los Diputados ha dado el visto bueno a la reforma del Convenio de
Cooperación para la Defensa entre España y Estados Unidos que permitirá el
despliegue permanente de 2.200 marines norteamericanos en la base aérea de
Morón de la Frontera (Sevilla), más otros 800 de forma temporal, con el
objetivo de poder desplazarse rápidamente al norte de África ante eventuales
crisis que pongan en peligro a ciudadanos e instalaciones de su país y otros
miembros de la OTAN.
El ministro de Exteriores y
Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha considerado el convenio
"capital" para reforzar la seguridad y también desde el punto de
vista del "anclaje" con Washington y que, a su juicio, "solo
puede traer beneficios" en términos de riqueza y empleo para la zona. El
Ejecutivo prevé una inversión de 26 millones de dólares que
"necesariamente" se traducirá en más riqueza y empleo a pesar de que
el Gobierno español no ha sido capaz de lograr que el estadounidense se
comprometa a asegurar los empleos que actualmente sustenta la base. Tampoco a
comenzar un proceso de readmisión de los 240 trabajadores que han sido
despedidos desde 2010 mediante tres procesos de ERE.
La reforma, que fue rubricada
por los gobiernos norteamericano y español en Washington el pasado 17 de junio,
ha sido secundada por 302 votos de PP, PSOE, CiU, UPyD, PNV, UPN, CC y Foro, y
ha obtenido sólo 16 votos en contra de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Amaiur
y Geroa Bai. Esta enmienda, la tercera que se incluye en el Convenio de Defensa
desde que fue firmado por ambos países en 1988, ha sido tramitada en un solo
debate en el Congreso, lo que ha recibido las críticas de buena parte de la
oposición. Ahora se remitirá al Senado para completar su tramitación antes de
que termine la legislatura.
Varios diputados han
criticado la cifra de 26 millones de beneficios que ha ofrecido el Gobierno por
"vaga y no vinculante"
Diego López Garrido, del
PSOE, ha respaldado el convenio al entender que otorga mayor capacidad de
reacción ante crisis militares o humanitarias y aporta "más
seguridad" y mayor eficacia disuasoria. De esta forma, el diputado del
PSOE se alineaba con el Gobierno y desoía las advertencias de los grupos
pacifistas, que advierten que el aumento de la colaboración militar con EEUU
puede aumentar el riesgo de atentados en España.
ANDALUCÍA: EL CAGADERO DE LO USA EN EUROPA.
No hay nadie que pueda negarme que firmar acuerdos de este tipo es propio de países tercermundistas. De esos que tanto desprecia nuestro gobierno cuando habla de los gobiernos del cono sur americano. Allí, las oligarquías latinoamericanas gobernaron mucho tiempo bajo cobertura de sanguinarias dictaduras militares impuestas por los USA en su beneficio. Estas oligarquías servían a los intereses económicos y estratégicos del país del norte y a cambio recibían el derecho de pernada y usufructo (latrocinio) de la satrapía tutelada.
Tener bases de un ejército extranjero permanente en España supone de todas todas una sonora claudicación de soberanía de nuestra política tanto exterior como interior, pues coharta cualquier movimiento que, aunque beneficioso y necesario para el país, no lo sea tanto para los intereses del ocupante. Lo que se traduce que no somos libres para realizar la política internacional que más nos interese o convenga al pueblo español.
Con el ejército estadounidente acantonado de manera permanente en nuestro territorio, ya no podemos mantener nuestro perfil de país pacífico, ni aportar gestiones propias que lleven a hacer de este mundo un lugar menos peligroso. Las palabras del socialista López Garrido para defender en el Congreso la firma de la infame cesión de Morón no dejan lugar a dudas sobre el complot de la derecha contra la soberanía y esa pretendida "seguridad" que hoy más que nunca y tras ese acuerdo está en el punto de mira de las ojivas nucleares rusas. Y hacerlo aludiendo como beneficio al (posible) empleo que esa base puede procurar a la zona es ya el no va más del cinismo cuando la ola de despidos de españoles mediante ERES mantienen un conflicto aún no resuelto con esas bases. Qué menos que en este vejatorio acuerdo de cesión y ampliación de la base militar de Morón el gobierno español y el Partido Socialista no plantearan ninguna claúsula que obligue o de preferencia al menos a la recolocación de los 247 despedidos de la base en cuestión. A cambio EEUU nos mea en la cara al manifestar con el mayor de los descaros que no acata la jurisdición española en las relaciones laborales (refiriéndose a los despedidos de Morón). El imperio, lejos de agradecer el "regalo" impone, encima, sus humillantes condiciones. Esto es algo que sería muy difícil de aceptar por un gobierno digno y patriota.
Ni que decir tiene que admitir un ejército permanente extranjero en nuestra país conlleva estar de acuerdo y apoyar las agresiones y guerras que dicho ejército realice en el resto del mundo, siendo por tanto blanco de las posibles respuestas a estas agresiones. Rusia ya ha manifestado que en caso de una agresión otanera a sus país, borraría del mapa–– convirtiéndolas en ceniza–– todas las bases del DAM (Escudo antimisiles) instalados en Europa.
Andalucía occidental desaparecería y con ella centenares de miles de personas.
j.m.boix
Tener bases de un ejército extranjero permanente en España supone de todas todas una sonora claudicación de soberanía de nuestra política tanto exterior como interior, pues coharta cualquier movimiento que, aunque beneficioso y necesario para el país, no lo sea tanto para los intereses del ocupante. Lo que se traduce que no somos libres para realizar la política internacional que más nos interese o convenga al pueblo español.
Con el ejército estadounidente acantonado de manera permanente en nuestro territorio, ya no podemos mantener nuestro perfil de país pacífico, ni aportar gestiones propias que lleven a hacer de este mundo un lugar menos peligroso. Las palabras del socialista López Garrido para defender en el Congreso la firma de la infame cesión de Morón no dejan lugar a dudas sobre el complot de la derecha contra la soberanía y esa pretendida "seguridad" que hoy más que nunca y tras ese acuerdo está en el punto de mira de las ojivas nucleares rusas. Y hacerlo aludiendo como beneficio al (posible) empleo que esa base puede procurar a la zona es ya el no va más del cinismo cuando la ola de despidos de españoles mediante ERES mantienen un conflicto aún no resuelto con esas bases. Qué menos que en este vejatorio acuerdo de cesión y ampliación de la base militar de Morón el gobierno español y el Partido Socialista no plantearan ninguna claúsula que obligue o de preferencia al menos a la recolocación de los 247 despedidos de la base en cuestión. A cambio EEUU nos mea en la cara al manifestar con el mayor de los descaros que no acata la jurisdición española en las relaciones laborales (refiriéndose a los despedidos de Morón). El imperio, lejos de agradecer el "regalo" impone, encima, sus humillantes condiciones. Esto es algo que sería muy difícil de aceptar por un gobierno digno y patriota.
Ni que decir tiene que admitir un ejército permanente extranjero en nuestra país conlleva estar de acuerdo y apoyar las agresiones y guerras que dicho ejército realice en el resto del mundo, siendo por tanto blanco de las posibles respuestas a estas agresiones. Rusia ya ha manifestado que en caso de una agresión otanera a sus país, borraría del mapa–– convirtiéndolas en ceniza–– todas las bases del DAM (Escudo antimisiles) instalados en Europa.
Andalucía occidental desaparecería y con ella centenares de miles de personas.
j.m.boix