Saturday 24 December 2011

¿CÓMO ES POSIBLE TAMAÑA IMPUDICIA?

MINISTRO DE DEFENSA Y FABRICANTE DE BOMBAS.
NINISTRO DE ECONOMIA Y FABRICANTE DE ESTAFAS.

Thursday 22 December 2011

TAMBIÉN EL DIABLO DISPONE DE UN BRILLANTE CURRÍCULUM.


 
Ciertamente, y como se han apresurado en coincidir la mayoría de comentaristas políticos y demás asiduos rastreros de tertulias televisivas, prensa y otros estercoleros del sistema, Rajoy  presenta un gobierno “con un deslumbrante lujo curricular”.
Para empezar, ¡alucina Catalina!, el nuevo presidente nombra a un lumbrera con un fantástico cursus honóribus”, en todo lo que refiere a estafas, especulaciones, enjuagues, fraudes etc. como ministro de economía o lo que es lo mismo: pone al lobo al cuidado de las ovejas. Porque el señor Luis de Guindos se ha enriquecido trabajando como alto ejecutivo para España de Lheman Brothers, que como todos sabemos y es necesario recordar aquí, fue la desencadenante inicial de la crisis que padecemos a partir de la inmensa estafa de las subprimes, paquetes tóxicos, etc., etc. Personalmente no creo ser muy exigente cuando afirmo que éste hombre debería estar en la cárcel por su contribución al inmenso daño causado. En todo caso estaría pidiendo que se le aplicara la ley como se haría con cualquier otro ciudadano que hubiera colaborado en una gravísima estafa con resultado de estrago mundial.  Sin embargo, muy al contrario, Rajoy premia escandalosamente a este virtuoso ingeniero del fraude, haciéndole ministro ¡de economía! No me cabe ya ninguna duda que con el nombramiento de tamaño personaje, el peligro es inminente para todos nuestros raquíticos bolsillos. En verdad, con Luís de Guindos, el mercado de ladrones y especuladores toma oficialmente el poder en España, como lo ha tomado de una manera u otra en Irlanda, Grecia, Portugal e Italia. No olvidemos que en este último país, Mario Monti, presidente impuesto por este mercado de facinerosos, es miembro destacado de Goldman Sachs, Club de Bilderberg, Trilateral y alguna secta más que se me escapa. 

Y continuando con esa escasa moralidad que Rajoy exige a sus políticos en ejercicio, pone al frente del Ministerio de Defensa a un sujeto, el señor Pedro Morenés ––también de exitoso currículum ––, que ha dedicado parte de su honorable vida a jugar al golf mientras su empresa, INSTALAZA fabricaba las criminales bombas de racimo, hasta que éstas fueron prohibidas por la legislación internacional y española por las masivas e indiscriminadas muertes que producen. En el momento que le nombran, está al frente como director general de la filial estadounidense MBDA, fabricante de misiles y otros artefactos infernales. También pienso que este tipo de empresarios deberían estar en la cárcel por enriquecerse y conseguir estatus y dinero a costa del mercado de terror y muerte que representan y promueven. ¿Cuántos miles de cadáveres de anónimos inocentes cargará en sus espaldas este  nuevo y brillante currículum de ministro?
Por lo demás, nadie ha protestado por la incompatibilidad que supone hacer ministro de defensa a un fabricante de armas. Hay cosas que son obvias aunque la ley no lo haya previsto. Pero ya se sabe que cuando la moralidad es un estorbo para el poder y el dinero…
Porque, ¿alguien duda que el señor Morenés no aliente desde su ministerio las guerras en el mundo? Desde luego que con el currículum que tiene lo veo difícil. Finalmente, y según se asegura en algunos medios, en el nombramiento de este importante cargo como es Defensa, influye bastante la opinión o recomendación del rey, Juan Carlos, como jefe del ejército. Sin comentarios.
Finalmente y ante estos nombramientos que a más de uno le habrá dejado despatarrado, es importante recordar que también el Diablo dispone de un magnífico y más que sobrado currículum.
Que no nos pase ná.

j.m.boix 

Wednesday 21 December 2011

FELICES RECORTES, AMIGOS.


PROMETEDORA "INSTANTÁNEA" QUE NOS MANDA EL AMIGO, RICARDO VAREA DE MAIRENA

Thursday 8 December 2011

LA TABERNA DEL TADEO. Elecciones Generales.



--Debo tener el cuerpo malo, siento como un frío… Échame una coñá.
--A mi un anís de los míos, Tadeo.
––¡Eh, eh…! El dinero por delante.
––Que sí, Tadeo. Que hoy cobras.
––Bueno, Greñas, pero el dinero por delante.
––Ya lo tienes.
––¿Cómo que ya lo tengo?
––Sí, mira. Por ahí va el Pérez haciendo campaña.
––¡Y qué!
––Pues que él te va a pagar la cuenta.
––¡Qué sabio eres, Greñas!
––¡Mundo que tiene uno, Pajillero!
––¡Mira, ya viene a pedirnos el voto!
––No te lo he dicho.
––¡Buenaaas, familia!
––¡Buenaaas, señor Pérez!
––Echa aquí una rondita a los señores, Tadeo.
––Ya estamos tomando.
––Pues venga, echa otra que hoy invita el partido.
––Nada más por eso os voy a votar.
––Gracias, Pajillero.
––Y yo también.
––Gracias, Greñas.
––¿Y lo de mi hijo qué? El pobre lleva sin trabajar… A ver si lo enchufas en el Ayuntamiento.
––Que sí, Greñas. Lo tengo en puertas. Pero me tienes que votar porque si votas a los otros…
––¿A los fascistas? Que sepa que en esta taberna somos todos de izquierdas, ¿verdad Tadeo?
––Digo que sí. Pobres pero honraos.
––Hacéis lo correcto, muchachos. Rubalcabras nos sacará de la crisis y dará trabajo a todos.¡Es el mejor! Tomad nuestro programa.
––Bueno, adiós. Voy a seguir la ruta.
––Vaya con Dios, Pérez.
––¿Tendrá cara el nota? ¿Pa qué tienen un programa si luego no lo cumplen?
––Estos sociatas de mierda…
––Mira, ahora viene por ahí el facha.
––Qué pedazo de traje trae. También va descalzo.
––Ve echando otra rondita que seguimos teniendo crédito, Tadeo.
––Buenos días, vecinos.
––Buenos, don Baldomero.
––Echa aquí a los señores de lo que estén tomando, Tadeo.
––Gracias don Baldomero.
––Hay que cambiar España. Estos socialistas la han hundido.
––¡Diga usted que sí, don Baldomero!
––Pues claro, Pajillero. Hay que ahorrar, gastar menos. Menos subsidios y más trabajo.
––Si le da un curro a mi pobre hijo, le voto diez veces seguidas.
––Con una me basta, Greñas. Veré lo de tu hijo…
––¿Una copita, don Baldomero?
––Gracias Tadeo. Ponme un Napoleón.
––De eso no tengo. Es muy caro.
––Bueno, Tadeo. Pero es un coñac español y hay que levantar España. Aquí tenéis el programa para los españoles decentes.
––Nosotros somos muy decentes, don Baldomero.
––Pues el domingo a votarnos.
––Cuente con nuestro voto.
––Bueno, adiós señores que aún queda mucho vecino por redimir.
––¡Adiós, don Baldomero!...
––Será joputa, el pepero...
––Calla que te va oír, Pajillero.
––Ponme un Napoleón, Tadeo. ¿Pero Napoleón no era un franchute? [risotadas].
––¡Hay que levantar España, dice el joputa! A España no la levanta ni la Culombina, que ya es decir.
––Y anda que con el culo que tiene la tía…
––Eh, eh… Por ahí se acerca el Felipe.
––Míralo. Sin corbata y con esos pelos...
––No es mal chaval, pero es un perdedor. Ve poniendo otra rondita, Tadeo.
––Pero, ¿este pagará?
––¡Buenas, compañeros!
––Buenas, Felipe. Vamos a ganar, ¿no?
––Hombre sería lo suyo, Greñas. Los trabajadores puteaos somos muchos más.
––Pues en esta barriada hay mucho comunista. Tú sabes que nosotros somos de los tuyos de toda la vida.
––Sí, Pajillero, mucho comunista pero luego no se les ve el voto por ningún lado. ¡Venga, Tadeo, ponme una copita que la pagan éstos!
––¡¿Quéeee?!

j.m.boix

Tuesday 15 November 2011

BAJO EL OJO DE POLIFEMO.



Estas elecciones no son unas elecciones cualquiera, son cruciales la miremos del ángulo que la miremos. La debacle de un PSOE traidor a su clase deja a una gran parte de la izquierda que le votó en una peligrosa orfandad de la que tiene que salir de manera urgente. Máximo en los tiempos que corren, con una Europa dominada por ladrones y dispuesta a acabar con el estado del bienestar y un Partido Popular que pretende alzarse como “salvador” de una ruina que, sin duda, pretenderá perpetuar a favor de los ricos. Porque no nos hagamos ilusiones –quien se las haga — de que el PP va a estabilizar el país en lo que refiere a la superación del desempleo, la estabilidad de las ayudas a los desempleados, la recuperación de las pensiones, etc. Nada de eso. La felona y corrupta política socialista al extenderle la alfombra roja a la gran derecha hasta el límite de cambiar la Constitución como garantía de pago a los banqueros, es un maldito y envenenado legado a las clases populares y trabajadoras. El PSOE no sólo les ha ofrecido a las hordas de la derecha la cabeza en bandeja del trabajador, sino que también un derecho “sine die” de pernada contra un pueblo llano que se desangra con cinco millones de desempleados.

En estos momentos y más que nunca, debemos mantener la cabeza lúcida y taparnos los oídos frente a los mágicos cánticos que la vieja Circe nos ofrece para atribularnos ante el próximo 20-N en favor de Polifemo. Porque la abstención, el voto nulo o en blanco favorece a este Cíclope ad portas dispuesto a devorarnos. No podemos titubear, ni pensar en soluciones peregrinas de última hora. Debemos aparcar nuestras sempiternas diferencias y votar. La partida está pérfidamente amañada entre los dos grandes partidos de derecha, PP y PSOE, para asestar un definitivo y mortal jaque y mate contra el pueblo trabajador en este próximo 20-N. Nunca estuvieron las cosas tan claras como ahora.

Creo con toda la honestidad que debemos concentrar nuestro voto en Izquierda Unida, que es la única alternativa posible que tenemos en la izquierda. Debemos darle a Cayo Lara esa confianza, ese poder necesario en número de votos para que frene a una bestia que hoy anda más libre que nunca. Porque este nuevo y moderno formato de fascismo que nos asfixia no necesita de sangrientos espadones, al disponer como dispone de tanto gobierno y político corrupto. La reconversión de nuestra democracia en un apestoso lupanar ha favorecido esta colosal coyunda a los más débiles por parte de una plutocracia que ha decidido tomar el mando sin concesiones.
No son tiempos de seguir dando cuartelillo a la desesperanza. Debemos movilizarnos e ir a votar. Depositar nuestras esperanzas en esa única alternativa de clase que nos queda: Izquierda Unida. Los demás experimentos, mejor con casera.
j.m.boix

Wednesday 2 November 2011

Papandreu defiende que 'la democracia está por encima del apetito de los mercados'

                                                                         Foto El Mundo

Al fin, parece que hay un demócrata en Europa. Esta frase de Papandreu debía haber sido coreada por todos los gobiernos que se dicen democráticos y que, por el contrario, sirven con devoción a esta barbarie impuesta por los perros del dinero. Unos perros que no terminan nunca de saciarse con la teta inacabable de una crisis que parece estar bien calculada. Para empezar a solucionarla habría que echar a patadas a todos los actuales políticos europeos y reemplazarlos por demócratas al servicio de la ciudadanía y no de los mercados. 

Porque ya está bien de una crisis que no comenzó, precisamente, por el impago de ninguna deuda soberana de los paises hoy en jaque, y sí por la propia gestión catastrófica de ese mundo financiero que operó como un bandolero al margen de los Estados y de la propia democracia. Ahora, sus voceros lacayos –– incluidos los tertulianos radiofónicos y televisivos de siempre –– nos están vendiendo la película al revés, como si  la "sociedad del bienestar" y los salarios laborales fueran los causante de una debacle económica que repito, parece programada por aquellos que se están poniendo las botas con ella.
 No soy economista ni nada que se le parezca, pero los que lo son tampoco parecen serlo. 

Porque al margen de la suma gravedad de los acontecimientos, es de un carcajeo munumental estas reuniones de los grandes de Europa que prometen solucionarlo todo con más recortes para los pueblos y más dinero al lobo banquero, unas soluciones que se quedan en pavesas a los dos días, y vuelta a empezar con más dramáticas reuniones, más recortes, más dinero al lobo y así, ad infinitum. Si esto es una política económica, que venga Dios y lo vea.
Lo que está claro es que con estos villanos y ramplones procedimientos nos están robando la democracia, la cartera y la propia vida, y eso el ciudadano lo tiene claro. Ahora Papandreu se enfrenta a desertores de su propio partido que rechazan la legítima vía democrática de un referendum para consultar a unos griegos que han perdido su soberanía y cuyo destino como pueblo se dilucida en los fríos e inhumanos despachos de los grandes bancos franceses y alemanes. Pero éstas son las ratas de siempre, las que abandonan el barco cuando ven peligrar sus sueldos y privilegios si no hay rescate. Las mismas que tenemos en España y en abundancia.

Es difícil saber lo que va a pasar pues los ciudadanos, más pacíficos y honrados que los propios gobiernos, no tienen más armas de defensa contra esta ignominia que la de manifestarse pacíficamente. Porque un paso más allá en la lógica protesta popular nos encontraríamos con una brutal represión dispuesta a ensangrentar las calles para defender un estado de derecho que proteje el latrocinio de estos perros del dinero. 

j.m.boix 

Tuesday 25 October 2011

EL ALIENTO DEL MIEDO (Las otras víctimas del terror).



Llevamos más de treinta años de democracia en nuestro país y aún en nuestros días se siente un miedo irracional a hablar de ciertas cosas que atañen al poder y a la autoridad.
He sido concejal en un precioso pueblo del aljarafe sevillano, hoy devastado por el ladrillo, y durante ese tiempo he tenido ocasión de conocer y experimentar cómo aún perdura esa maligna influencia entre las gentes de mediana edad y la más mayor. Un miedo que parece ancestral, que les hace bajar la voz y mirar de soslayo cuando hablan de política, o cuando critican al alcalde o al todopoderoso partido que éste representa. Miedo a criticar al poder, a señalarse ante el poder por si esto les puede producir problemas o perjudicar a la hora de pedir una licencia de obras, un favor para el hijo desempleado, un subsidio… En la Andalucía profunda, aún perdura el miedo y la sumisión al señorito, sentimiento sublimado por el yugo de más de cuarenta años de terror franquista.

Cuando un político de pueblo quiere saber del pueblo, conocerlo en sus auténticas tripas, entre otras actuaciones debe alternar sus bares, esas sacrosantas y humildes tabernas del vasito y la tapa de oliva o de altramuces. En estos templos populares se redime el pueblo llano, el que sufre y arrastra las consecuencias de una vida injusta y mal repartida. Al cobijo de sus paredes y del caldo barato, protesta, se envalentona y se atreve, eso sí, siempre que no hayan presencias inoportunas. Si hay hueste del poder por medio, la parroquia se enreda en difusas banalidades o practica la farfulla jocosa mientras miran de reojo al temido y odiado poder.

En cierta ocasión me interesé por la Memoria Histórica de mi pueblo y tras múltiples esfuerzos contacté al fin con un par de supervivientes de su casco histórico que se ofrecieron a hablar conmigo y que evitaré dar sus nombres; dos ancianos de longevidad admirable que se prestaron a que les hiciera una entrevista sobre los desaparecidos o asesinados en el pueblo bajo la represión franquista. Invité a cada uno de ellos por separado, y los dos tenían víctimas represaliadas o asesinadas por la dictadura. También conocían casos fragantes y terribles de otras familias del pueblo que, sin embargo, declinaron cualquier tipo de contacto conmigo sobre este asunto. Lo que más me impresionó de ellos es que a pesar del tiempo transcurrido, sus alientos aún olían a miedo, un miedo irracional que agarrotaba sus palabras a la hora de expresarse. Uno de ellos, el más joven por decirlo de alguna manera, se ofuscó, reconociéndome al final, que aún vivía en el pueblo el que denunció a su hermano y a su padre. Al hablar de éste último le caían las lágrimas al recordar como él, siendo aún un niño y junto a su madre, le llevaban comida a la cárcel, rezando para encontrarle vivo. “Mi padre era un jornalero del campo que a duras penas mantenía a su familia y que nunca hizo nada ni se metió con nadie”, me decía una y otra vez, sin comprender todavía aquella colosal barbarie de terror que llevó la desgracia a su familia. Cuando le pregunté por el delator, no me dijo su nombre y evitó continuar la conversación, resignándose a que la muerte matara finalmente sus miedos y penas. Al intentar convencerle de que estábamos en una democracia y que podía hablar libremente me dijo desorbitando los ojos y en un encendido susurro que desgarró su garganta: "¿Democracia...? ¿Qué clase de democracia permitiría que ese criminal de Queipo esté enterrado en la capilla de la Macarena como un miembro de honor de la cofradía?" Luego, un tanto abatido abandonó la mesa, alegando que tenía que irse a casa.

El otro anciano me habló del famoso “Barco del Arroz” --una especie de Academia Mecánica que en aquellas fechas fondeaba en el Guadalquivir y a donde –– según su testimonio -- se llevaron a más de uno del pueblo que nunca más regresó. Una de las cosas que más me impactó fue cuando el anciano dijo que los viejos y no tan viejos fascistas del lugar aún velaban sus armas, y que en la noche del golpe de Tejero se reunieron en un secreto comité para organizar los asesinatos a conocidos rojos del pueblo y redimir así viejos rencores si el golpe triunfaba. Le exigí que me diera sus nombres, porque aquello me pareció muy grave, pero tampoco logré rescatarle del miedo que le embargaba.
Claro está que tales y espeluznantes afirmaciones también podían suponer que no fuesen ciertas, sin embargo un compañero concejal, amigo mío y de mi misma edad, me confirmó que en aquella fatídica fecha del golpe alguien anónimo del pueblo le llamó por teléfono a su casa para decirle que iba a ir a buscarle para pegarle dos tiros por ser comunista. Y es posible que tal situación se diera en muchos pueblos de España, donde viejos y no tan viejos fascistas del viejo régimen continúan agazapados y envalentonados, esperándo siempre la más mínima oportunidad porque hasta hoy nadie les ha condenado, ni les ha llamado públicamente asesinos.

¿Qué conclusiones se pueden sacar de esta situación, de ese miedo que aún perdura en tiempos de democracia y que el ciudadano lleva tan adentro? Cada cual puede sacar las suyas, pero creo que la propia indefinición de esta extraña democracia ante estos crímenes y genocidios tiene mucho que ver. Hasta el día de hoy, las víctimas del franquismo son tratadas por este nuevo Estado como los trapos sucios de un pasado que se pretende enterrar en el olvido. La falta de una condena solemne y enérgica, la ausencia del debido resarcimiento moral y económica de las víctimas, el mantenimiento infame de las criminales sentencias militares y las del TOP (Tribunales de Orden Público), la falta de resarcimiento a sus legítimos dueños de las rapiñas del Régimen Franquista, constituyen gravísimos incumplimientos de una democracia que, como corean los "indignados" parece realmente no serlo, y que muchos miramos de reojo y con soterrada desconfianza. De ahí el miedo a no tener las cosas claras, a que renombrados fascistas anden aún por ahí sueltos y amenazantes, seguros de que el nuevo régimen de libertades les protege como de nuevo ha quedado constatado en la nueva ley de compensaciones a las víctimas del terrorismo –– aprobada por unanimidad por los partidos democráticos en el Senado y Congreso –– de la que claramente se infiere que en este país no ha habido más terrorismo criminal que el de ETA, ignorando de manera injusta, inmoral y obscena a los asesinados por un régimen de terror incalificable que continuó matando, incluso, más allá de la aprobación de nuestra Constitución del 78.

Ante esta situación de solemne cobardía de los partidos de izquierda al consentir en seguir haciéndole el juego a una democracia que continúa secuestrada por la Transición, es fácil comprender que el miedo y la desconfianza siga campeando en el subsconsciente de unos pueblos que saben que los asesinos aún andan sueltos, y algunos hasta condecorados y con buenas pagas.

j.m.boix

Friday 14 October 2011

UN FIN DEL MUNDO DE TABERNA..




Tres parroquianos en un barucho de una barriada marginal de Sevilla:

--Así que hoy vendrá el fin del mundo.
--Digo. Sobre las doce y cuarto de la mañana lo más tardar.
--Pues el calor que hace… Debe ser por eso del fin del mundo que dices.
--Claro. El fin del mundo produce calor.
--¿Y tú como estás tan seguro de que el fin del mundo será esta mañana, Greñas?
--Lo estoy y basta. Además, mira lo pesadas que están las moscas.
--Bueno, aún me queda tiempo de tomarme otra copita, Debo estar animado para cuando venga el fin del mundo ese.
--Ya van tres, Pajillero. ¿Tienes dinero para pagar?
--¿Para qué quieres el dinero, tronco? Ahora cuando llegue el fin del mundo se acabará todo, ¿no es verdad Greñas?
--Claro. Sobre las doce y cuarto, doce y media lo más tardar.
--¡Y todos al carajo! [risotadas carajilleras].
--¿Y el rey sabe que viene el fin del mundo?
--Claro, Tronco.
--¿Y por qué? ¿Tú lo has avisado?
--No, pero lo sabe porque es el rey.
--Ahhh, el joputa lo sabe todo…
--Claro.
Uno de ellos se acerca a la ventana y mira el cielo.
--¿No habéis notado la claridad de la mañana? Está como chamuscada.
--Cenicienta. Está cenicienta, diría.
--¿Cenicienta? ¿Qué tiene que ver la Blancanieves esa...? 
--Nooo, de ceniza. Cenicienta de ceniza.
--Ponme a mi otra copita, Tadeo, que esto se acaba ya mismo.
--Me da no se qué que venga el fin del mundo y no haya chingado lo suficiente…
--Bueno, Pajillero. Vete al retrete porque aún te da tiempo de hacerte una de las tuyas. Pal caso…
--El cielo oscurece más. Venid y asomaros a la puerta.
--Sí.
--Es verdad.
--Ya se acerca.
--Tadeo, pon otra copita pa echarle valor al asunto.
--Me cague. Como no venga ya el fin del mundo ese…
--Mira, por ahí va la Culombina…
--¡Joer, qué culo tiene!
--Claro, por eso la llaman la Culombina.
--Paloma culona.
--No. Culo con un voltaje que achicharra.
--Dile algo. A lo peor la pobre no sabe lo del fin del mundo.
--¡Culombina!
--Ya viene, a esa le va la marcha. Mira que andares se trae…
--¿Qué queréis, joputas?
--El mundo que se acaba, Culombina.
--Ya era hora. Ponme una copita de dulce, Tadeo.
--Podíamos montarnos un rebujito para festejarlo. Con una hembra así…
Culombina se sentó en un taburete y abrió sus macizas cachas.
--¡Coño, si no lleva bragas, la tía!
Un fuerte trueno cimbreó la tabernucha.
--¡Ya está aquí! ¡Venga, a follar todos!
--¡Eh, eh…! De uno en uno.
La tormenta arreció y cayó un granizo de esos de medio kilo.
--¡Joer, los cristales de los coches!
--Esto no es el fin del mundo, es una tormenta de verano.
--Culombina tiene razón, Greñas.
--Pues si no hay fin del mundo no hay sexo, y el que quiera, a pagarlo a
veinte euros el polvo.
--Lo mismo digo. El que quiera copitas a pagarlas.
--Tranqui, muchachos --sacó, Greñas, un papel arrugado del bolsillo --.
A ver, a ver… ¡Claro, es mañana! He tenido un error de cálculo de
veinticuatro horas. Será mañana, a la hora de la cervecita que coincide
con el solsticio.
--¿Solqué?... ¿Seguro, Greñas?
--Que sí, Tadeo. Esta vez lo tengo clavao. Mañana a la una.
--Yo no puedo estar aquí a esa hora. Llegaré sobre la una y media.
--No importa, Culombina. El Greñas lo retrasará hasta que llegues.
Aquí donde lo ves, tiene mucho poder el nota este.
--Lígate algunas cajas de botellines, Tadeo.
--¿Pero las vais a pagar?
--¡Hombre, también quieres cobrarnos el día del fin del mundo!
--Pues procura no equivocarte esta vez, Greñas.
--Yo nunca me equivoco.


j.m.boix
 

Wednesday 28 September 2011

EL FRESNO Y LA GUERRA. (Relato corto)




















 
Era primavera, y apenas despejaba los sombríos humos de
una guerra, cuando tuve un extraño sueño donde alguien
me enseñó el lenguaje de los árboles.
Me dijo que ellos hablan a través de sus hojas cuando éstas
tiemblan, agitadas por el viento.
A la mañana siguiente marché a la colina para hablar con el
viejo y dorado fresno, y una suave brisa me susurró su nombre.
Él me contó de mí, de mis padres y de mis abuelos… Me dijo,
entre sollozos, que los vio morir y también a muchos de sus
hermanos del bosque, arrasados por las bombas y las llamas.
¡Malditas guerras!, elevó su voz el viejo fresno, aprovechando
un brioso golpe de viento…
Yo me abracé a él, y lloramos juntos la iniquidad y locura de
los hombres.
Entonces quise ser árbol y permanecer allí para siempre…
Él era la única familia que me quedaba.
 j.m.boix

Saturday 10 September 2011

11-S





Sería un hipócrita si dijera que los muertos, hoy consagrados en víctimas de la gran manzana, me duelen tanto. Decididamente, ni por asomo, tanto como esos otros anónimos y olvidados, sepultados por el odio, la venganza y la indiferencia... Me duelen mis muertos por hambre, por guerras que claman a Dios...
j.m.boix